8.16.2007

El sueldo ético

El llamado de la iglesia a instaurar un sueldo ético es tal vez un ejmplo más de la clásica relación por medio de la culpa que ella tiende con sus fieles. Pero está visto que, cuando se trata de meterse la mano al bolsillo, la culpa no funciona mucho con los empresarios católicos .

Es una contradicción divertida que, en líneas generales, quienes comparten las orientaciones morales de la iglesia no compartan sus orientaciones sociales y que quienes sí se identifican con su mensaje social no se vean representados en su doctrina moral.

Es difícil ser católico de verdad. Habría que ser progresista y cartucho, un bicho muy raro. Como los tiempos no están para andar quemando herejes, la jerarquía de la iglesia tiene que conformarse con un rebaño que la sigue a medias. Incluso Benedicto 16 parece no estar persistiendo todo lo que se esperaba en su agenda ortodoxa.

Aunque el problema real de la iglesia y de la gente que alberga buenas intenciones sociales es otro. Tanto la economía como el sexo responden a los impulsos biológicos de la procreación y la sobrevivencia. Inscribirlos en las esferas de la ética y la moral resulta contraproducente.

La historia demuestra que cada vez que se ha intentado atribuir principios de justicia racional al mercado, sólo se ha creado más pobreza. Es una constatación odiosamente facha, pero hasta el momento no ha surgido experiencia que la desmienta.

La restricción de los impulsos sexuales según un diseño moral ha derivado en represiones, neurosis, psicopatías y otras calamidades (también una que otra desviación sexual placentera, si no todo es tan malo tampoco).

El mercado no es cruel, como decía Patricio Aylwin. El mercado es amoral, igual que la naturaleza. Eso se confunde con crueldad, pero un terremoto no es realmente cruel. Lo cruel son sus consecuencias para quienes no han tenido las mismas oportunidades que otros. Y ahí sí que pueden entrar las buenas intenciones racionales de los humanos.

Lo ético no debe perseguirse en los sueldos, sino en cuán iguales son las oportunidades que tenemos para acceder a sueldos y vidas decentes. Al menos con los seres vivos de nuestra misma especie, deberíamos procurar que nadie nazca en desventaja, cosa que también parece natural. Lo otro sería eliminar justo después de nacer a las crías que van a sufrir , pero parece que no estamos genéticamente programados para eso.

La gente que cree en abstracciones universales como el progreso continuo, el cristianismo y el islam es la que está depredando el planeta y creando pobreza. El regreso a una vida más natural y libre de creencias inviables sería, curiosamente, más ético y justo.

12 comentarios:

L Mery dijo...

Lo que pasa es que la iglesia igual que los partidos políticos, tiene más simpatizantes que militantes. El penúltimo párafo me recordó a F. Vallejo y sus teorías de cómo eliminar la pobreza (especialmente en La Virgen de los Sicarios) uff... mejor que escriba nomás... Con lo de las creencias inaplicables... me perdí, que sería eso?

Sergio Fortuño dijo...

Creencias inapicables vendrían siendo cosas como la ética y la moral en ámbitos como la economía y la sexualidad. Una creencia aplicable sería la ética en el campo de la igualdad de oportunidades, que ahí sí funciona.

Anónimo dijo...

Llama la atención que en el texto se destaque una visión Smithiana de la sociedad. En ésta visión, el "mercado", un sistema al cual el autor le asigna la cualidad de "justo por sí solo", aparece por sobre el hombre. Esto es una gran aberración, ya que deshumaniza al hombre, poniéndolo al servicio de un sistema, y no al revés, como debiera ser. Tanto es así que el autor sugiere que una solución podría ser eliminar a aquéllas personas que no sean aptas para este sistema. Lamentablemente, tanto el capitalismo como el marxismo no bastan por sí solos, ya que ambos sistemas apuntan a la deshumanización. Por lo tanto, el hombre, tiene el deber de cuestionar y plantear nuevas soluciones, desde soluciones parches hasta soluciones de fondo, para llevar adelante una economía que ponga al hombre y a la vida en primer lugar. Y no hay que contentarse con respuestas mediocres, como que el "mercado lo arreglará".

Unknown dijo...

y quien lo tiene + ético:

A.- bielsa??

B.- el conservador de bienes raices de stgo??

yo creo que C.-

Nimue dijo...

Es bastante complicado lo de la justicia social, hablamos mucho de la igualdad, pero tal como uno se da cuenta con la "parabola" de Amartya Zen, es muy dificil decidir que es igualitario o justo en cualquier decision: igualdad de oportunidades? de resultados? igualdad de capacidades?

¿Es valido fijarnos solo en el ingreso de las personas? ¿o es mejor fijarse en la felicidad o satisfaccion generada por lo que puede conseguir esa persona? ¿o en los tipos de vida a la que pueden acceder?

Cada una de las opciones tiene una escuela de pensamiento que la defiende, y realmente.. es dificil decidir, Rawls, Nozick, Zen, Bentham, ufff, de este tema se puede hablar demasiado rato XD

Anónimo dijo...

Asi que la moral y la etica, como preguntas e intentos de respuesta definitivamente humanos, no deben o no pueden ser aplicadas a la economia?

Entonces si son inaplicables la moral y la etica a la economia, bajo que premisas debe ser esta aplicada a la hora de regular (o desregular) actividades humanas por parte de un gobierno, directorio de una empresa, etc?

Por lo tanto, consideramos a la economia al nivel de ciencia pura, como las matematicas, casi en el nivel de las esferas perfectas inamovible y eterno, al decir de Aristoteles?

Anónimo dijo...

Es una error conceptual pensar que la economía esta vaciada de una ética, o una visión normativa de como distribuimos nuestro bienestar social.
El pensamiento neoliberal o su opuesto expresado en economías planificadas o centralizadas tiene necesariamente a la base un supuesto ético del comportamiento de los ciudadanos
De hecho la economía y las transacciones que dentro del sistema seproducen se sustentan bajo este pacto que debe ser resguardado, si la distribución o mala distribución genera tensiones tales que finalmente derivan en que este pacto se rompa, simplemente todo se va a la mierda y nos volvemos a la ley de la selva (siendo extremista)
Yo siento que el tema del sueldo ético, es preguntarse por estas tensiones, como estamos manejando las expectativias en un Chile que - según los expertos - ha cambiado.

Veronica dijo...

Es difícil ser católico, solo por quienes están a la cabeza de la Iglesia Católica, por eso yo soy como decía el Coco Legrand, Católica pero a mi manera. De esta manera mi mayor preocupación es la justicia social, hay cantidad de curas y monjas que se descrestan trabajando por la dignidad de los más pobres, como los hay de otras religiones y agnósticos, mientras personas como el Papa quienes deberían ser un ejemplo de bondad y entrega visten ropas y joyas, y viven en Mansiones que pagarían las herramientas para palear el hambre en varios países de Africa, o para educar a niños y niñas en centro américa, o para rehabilitar (de verdad) a jóvenes infractores de Ley en Chile...
Es muy fácil decirle a los demás que hacer, pero creo que el discurso de Goic no debería ir por el lado de un sueldo ético, sino por derribar las brechas sociales y salariales.
Es cosa de sumar y restar, ¿Cuánto gana una operaria en alguna de las empresas del grupo Angellini? y ¿de cuánto será la herencia que dejó Anacleto?.
No se trata de ser ultra izquierdista ni nada por el estilo.... solo es cosa de pensar que si un empleado es bien pagado, trabaja con ganas, y si trabaja con ganas, produce, y si la producción aumenta, a la empresa le va bien, puede contratar más gente, y así vamos creciendo todos...
Que lindo!!!... me voy a lanzar a político... o como decias en el programa de hoy, mejor me las doy de opinóloga, y cambio la farándula por la justicia social.... no se por qué me huele a fracaso seguro.

Catrala dijo...

Si hacemos una analogía entre sexo y economía, en Chile se produciria una gran diferencia: sólo en el buen sexo ganaría tanto el de arriba como el de abajo.

Sergio Fortuño dijo...

Gran observación, Catiushka. Aún así, en los sectores más pobres, el sexo seguro y portegido es más inaccesible por un tema de precios (de los condones, de los anticonceptivos, etc...) Un rico y un pobre pueden tirar igual de rico. Las diferencias empiezan a notarse desde la mañana siguiente.

Anónimo dijo...

Creo que anonymous tiene mucha razón, no hay actividad humana sin moral, lo que hay es mayor o menor grado de moralidad, pero ya pasamos esos tiempos en que se pensaba que las ciencias eran amorales, no lo son y no pueden serlo, toda actividad humana es moral, por definición. Justamente por ese pensamiento es que se ha llegado al descalabro que hoy experimentamos. Producto de esto es que ha surgido con mucha fuerza, aunque acá no le tomen tanta atención, la ética aplicada, con una bastante gruesa rama de ética de la empresa y ética económica. De hecho la economía es un brazo de la ética, surge en Aristóteles como una parte de la ética, como la parte que va a tratar de la justicia (pues la justicia junto con lo bueno, o el bien, son lo ético). Quizás sería mejor, para comenzar la discusión en todas las esferas, explicitar los términos, ya que a lo que nombramos economía, deberiamos llamarle crematística, que es justamente lo que estamos haciendo.
Les recomiendo textos de Adela Cortina y de Jesús Conill, ambos españoles, que están haciendo un gran trabajo en esta area.

Anónimo dijo...

La discusión no es tal y parece ser más una cortina de humo o mero espaldarazo a los sectores (en este sentido: personalidades) que se identifican con la Iglesia catolólica en Chile y que ha comenzado a decaer en el subconciente, muy imperceptiblemente, pero el proceso está echado.
Ahora, por casualidad, estoy escuchando a Judas Priest. Hace unos años atrás un chico de 19 años se disparó en la cara y sobrevivió un tiempo y hasta entrevistas grabadas dejó. La canción: "Better than you, better than me"; había un mensaje subliminal allí, habría confesado.
Pues bien, ¿cuál sería, en este caso, el mensaje subliminal de Goic? Para mí: "Apretemos algunos temillas no resueltos en la sociedad chilena, prepárate un speech, ten el discurcillo en la punta de la lengua". Curiosamente Matthey (con quien no comparto su ideario) apenas habló quedó visiblemente afectada; Alvear, en cambio, sumó puntos hasta para que una de las tantas encuestas que se hacen en Chilito la encumbrara como presidenciable a la par de Piñera.
En Chile hay elementos culturales del mismo estilo: en vez de hablar de frente se prefiere la parábola y hasta la ambiguedad in extremis. Lo del sueldo es meramente económico, si no me equivoco, no ético, moral o estético (aunque sería bonito ganar más haciendo lo que hacemos, ¿o no?).
El discurso quedó abierto, hubo una amplia seudodiscusión en los medios como si 1. Nadie antes se hubiese reparado en el tema y 2. Cómo la observancia cristiana delemita "lo bueno", "lo malo, "lo justo", etc.
Es una pena que no hemos avanzado nada con respecto a la Colonia. Chile es un país laico sólo en los textos escolares, mientras que en la práctica nos sumimos en una oblición tan profunda que perdemos el sentido del tiempo y el espacio.